Tal vez hayas pensado alguna vez que “claro, esto del marketing sólo funciona si le metes un pastizal detrás y usas complejas técnicas. Y en mi situación no es posible lo uno ni lo otro”. Dando por hecho que el marketing fácil y económico no existe.
Por suerte, el marketing fácil y barato no es un mito. Es una realidad. Pero requiere tiempo y curro de uno mismo. Si quieres conocer trucos para conseguirlo y saber cuánto cuesta el marketing, sigue leyendo. Este es el post que estabas esperando.
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¿El marketing tiene que ser complejo para dar resultados?
No. El marketing cuanto más simple, mejor.
¿Sabes por qué? Por uno de los mayores fundamentos del marketing que he aprendido. Uno que no encontré en los libros ni me contaron en el Máster. Pero que descubrí tras cometer muchos errores y escuchar a un Mastodonte del marketing: a la gente le gusta las cosas bonitas y sencillas.
Por lo que evita la complejidad. Simplifica tu marketing:
- Si te planteas estudiar absolutamente todos tus competidores: ERROR. Analizar tus 3 mayores competidores y el que más crece (aunque sea pequeño) te dará una visión general sin caer en “parálisis por análisis”. Simplifica el marketing.
- Si estás pensando hacer un anuncio con un mensaje complicado y escondido entre complejas metáforas que solo Albert Einstein entendería: ERROR. Decir claramente el mensaje hará que más gente se entere y tu probabilidad de venta aumente. Simplifica el marketing.
- Si estás considerando medir 50 indicadores diferentes para saber si llegas al objetivo: ERROR. Seleccionar los 4 ó 5 indicadores claves te liberará tiempo para conocer en profundidad los motivos (con 50 es imposible y el dato sin el porqué no te servirá). Simplifica el marketing.
En mi carrera, cuanto más he simplificado el marketing, mejores resultados he conseguido. ¿Casualidad? No lo creo.
¿El marketing necesita mucho dinero?
No. El marketing no requiere grandes pastizales para conseguir resultados ni ventas.
En mis propias carnes he vivido los dos casos. Grandes inversiones en marketing con un impacto en notoriedad y ventas reducido. Y, por contra, acciones con pocos euros pero un impacto de la leche. Moraleja: el dinero no da la felicidad ni te asegura resultados en marketing.
Mi recomendación es que vayas adaptando la inversión de marketing a las finanzas de tu negocio.
Eso supone asumir uno mismo las tareas de marketing al principio. Para comenzar, te aconsejo dos lecciones que me he llevado sobre el dinero y el marketing:
1# Prueba diferentes ideas con pequeñas inversiones, aprende y luego métele más pasta a la que pite. Por ejemplo, si tuviera una cafetería, ofrecería varios menus de brunch durante un par de semanas. Aprendería qué platos funcionan y cuando diera con el menú ganador, invertiría pasta para darlo a conocer. No antes.
2# Prioriza invertir en aquello que aumente tu probabilidad de venta. Siguiendo el ejemplo anterior, yo priorizaría antes la inversión en la compra de medios (como Facebook ads o Youtube) con una fotos aceptables del brunch. Y no la situación inversa: destinar el 99% del presupuesto a una superproducción de anuncio que luego verán 4 gatos porque no tengo dinero para medios. ¿Por qué? Porque los medios aumentan más tu probabilidad de venta.
A medida que vayan creciendo tus ventas, podrás invertir algo más en medios, en grabación de anuncios/fotos, investigaciones de mercado o contratar a alguien que te ayude en las actividades de marketing (brand manager). Todo llegará.
La realidad es que la inversión en marketing puede ser tan alta como una empresa quiera. No hay una regla universal. Pero los buenos resultados no están condicionados a grandes presupuestos. Sino a buenas ideas bien ejecutadas (otro fundamento que nadie me enseñó hasta llegar a un departamento real de marketing).
Si quieres saber más sobre el marketing, échale un ojo a este post ¿Qué es el marketing y para qué sirve?
¿Cuánto cuesta una campaña publicitaria?
La respuesta es: depende. En concreto depende de dos puntos: los objetivos que te marques y las tareas que asumas. Cuanto más ambiciosos sean los objetivos y más externalices, más caro.
Para tener una campaña publicitaría te tocará invertir principalmente en dos conceptos: la grabación/fotografía/montaje de un anuncio y la compra de los medios donde saldrá ese anuncio.
La inversión mínima con la que puedes tener ambos conceptos es, aproximadamente, 100€. Esta sería la opción más extra low cost y “do it yourself”: 0€ de anuncio si haces tú mismo la grabación/fotografía y la editas + 100€ de inversión mínima en Facebook Ads para impactar a varias decenas de personas. Barato y efectivo para el objetivo de empezar, pero hecho por uno mismo.
La inversión máxima de una campaña publicitaria es la que la empresa más rica del mundo decida. No hay otro límite. A cambio la empresa obtendrá un anuncio que parecerá una superproducción de Hollywood, estará en todos los medios mundiales y la gestión de la campaña publicitaria estará externalizada a otras compañías.
Como recomendaba antes, te aconsejo tres puntos: adapta tu inversión en publicidad a tus finanzas; arranca low cost probando diferentes ideas; y, al principio, mete más dinero en la compra de medios que en conseguir el cojoanuncio del siglo.
Recuerda: el dinero no da la felicidad ni te asegura resultados en marketing.
Si quieres conocer más detalles de las campaña de publicidad, el artículo ¿Qué es el marketing mix o las 4 Ps? (en la parte de “promoción”) cumplirá tus deseos.
¿El marketing es un cuento de charlatanes?
No. El marketing se sostiene sobre principios contrastados y datos robustos.
Un maquinón del gremio me contó una vez que el Marketing es como la arquitectura: tiene parte de arte y mucho de ciencia. Así, por muy bonita que sea una casa, si no se ha construido con las normas básicas de cimentación, la casa se caerá.
Igual en el marketing. Puedes preparar unos anuncios ingeniosos e impactantes (el arte), pero sin cruzarlo antes con los datos de tu consumidor y aplicar los fundamentos básicos del marketing (la ciencia), de poco te servirá para aumentar tus ventas porque se sustentará en opiniones en vez de realidades.
Obviamente, puedes olvidarte de cualquier dato, lanzar una idea y acertar. Como dice un amigo, hasta un reloj roto acierta la hora dos veces al día (0,1% de probabilidad de acierto frente al 99,9% de error). Pero partiendo de datos y fundamentos de marketing aumentarás por mucho la probabilidad de acierto del 0,1% del reloj roto.
De hecho, tal es el peso de la ciencia y de los datos en el día a día de un profesional del marketing que, si pudiera volver al pasado, le recomendaría a mi “yo del pasado” dos cosas para aterrizar mejor en esta profesión: grábate a fuego las asignaturas de Estadística y Econometría; y fórmate en Excel.
La gran relevancia de la ciencia en esta profesión hace que desconfíe de aquel que me habla de negocio sin un dato que lo justifique. Cuando me ha pasado, he visto una persona charlatana. He visto la probabilidad del 99,9% de error. He visto un reloj roto.
Atentamente,
Marketingantropo